La Enfermera Jefe del nuevo Subdepartamento de Red de Urgencia y Gestión de Camas, Karla Gómez Ortiz, detalló la función estratégica que desempeña esta unidad en el contexto de la actual crisis sanitaria que vive el país y la normalización de ciertos tratamientos que estaban en espera a raíz de la pandemia.

Frente a este complejo escenario, Karla y los otros tres integrantes de su equipo: una coordinadora de red de urgencia, una coordinadora de gestión de camas y un administrativo, han desarrollado un “trabajo intenso, arduo, casi sin fines de semana y 24/7, marcado por el esfuerzo y la tolerancia al estrés”.

“Este Subdepartamento de Red de Urgencia y Gestión de Camas atiende toda la red de urgencia del SSMSO, abarcando siete comunas de la Región Metropolitana, seis de las cuales cuentan con servicios de urgencia. En San José de Maipo atendemos postas rurales. Tenemos tres hospitales de alta complejidad de un total de cuatro, todos con servicios de urgencia”, explicó Gómez Ortiz.

Debido a la alta complejidad de administrar la red de urgencia y gestionar camas en una amplia zona geográfica y con una alta densidad poblacional, se creó este subdepartamento que integrara estos dos equipos: Red de Urgencias y Gestión de Camas.

El desafío que impuso la pandemia

“Producto de la pandemia todo se vio alterado. La red de urgencia se vio muy afectada, muy sobre exigida. Había una alta demanda en pacientes que requerían de cuidados especiales y que además necesitaban estar en lugares especiales, por un tema de aislamiento, para protegerlos de los que no tenían COVID”, comentó la especialista.

Por otro lado, Gómez Ortiz dijo: “Como la pandemia nos puso a prueba, se evaluó la posibilidad de integrar la gestión de camas a la red de urgencia, la que es abierta, recibe un número importante de pacientes, jamás puede cerrar sus puertas, aunque se vea sobrepasada en su capacidad de infraestructura, recursos humanos e insumos. Siempre tiene que atender a los pacientes y por eso es necesario que exista un flujo de salida. Y ese flujo de salida lo aporta la gestión de camas, que permite sacar pacientes de la urgencia para que siempre tenga una capacidad de recepción”.

Paralelamente, la Enfermera Jefe de este nuevo subdepartamento explicó: “Se diseñaron varias estrategias para dar respuesta a la alta demanda generada por la pandemia. De hecho, se crearon las “unidades de observación prolongada en la APS”, dada la poca capacidad de recepción que estaban teniendo los pacientes en las urgencias hospitalarias y para evitar la retención de las ambulancias en el exterior. Otra estrategia era tener camillas en salas definidas para pacientes respiratorios en contexto COVID, donde se les pudiera entregar lo que requirieran en un lugar seguro, con un recurso humano apropiado y la posibilidad de derivarlos a un hospital en forma programada y coordinada”.

“La gestión de camas también estuvo tensionada por la necesidad de hacer un flujo que permitiera sacar pacientes de la urgencia hospitalaria y tener siempre un cupo de recepción. Entonces se gestionó la derivación al sistema público-privado, principalmente privado e incluso regiones”, comentó Gómez Ortiz.

Actualmente, concluyó Karla Gómez Ortiz, “Este nuevo subdepartamento ha observado un incremento en la atención de pacientes no COVID, durante agosto y septiembre, apuntando a la normalización, pero ya en octubre se ha visto un aumentado de los pacientes COVID”.