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2 de abril de 2023

Hospitales Dr. Sótero del Río y Padre Hurtado obtienen certificación Internacional en Manejo Avanzado y Esencial respectivamente de pacientes con Accidente Cerebrovascular

El Hospital Dr. Sótero del Río es el primer establecimiento de salud del país en obtener una certificación del Comité Científico Internacional de Certificación de los Centros de ACV de América Latina de la World Stroke Organization (WSO) y la Sociedad Iberoamericana de Enfermedad Cerebrovascular (SIECV), como Centro Avanzado en Manejo de Accidente Cerebrovascular (ACV), debido a que sus servicios de Urgencia, Intensivo y de Neurología cuentan con equipos multidisciplinarios altamente preparados para atender este tipo de lesiones. Por su parte, el Hospital Padre Hurtado logró también acreditarse como Centro Esencial en tratamiento del ACV.

La WSO es una asociación médica global, sin fines de lucro, cuyo propósito es crear conciencia sobre la prevención y tratamiento del ACV.

La certificación implica cumplir con una serie de parámetros que se deben acreditar, dependiendo del tipo de centro: avanzado o esencial. Esto se define según el tipo de prestación de que se dispone como neurocirugía para ictus isquémico, intervenciones de trombectomía intravascular, hemicraniectomía para ictus isquémico y productos para tratar coagulopatía, son algunos parámetros que aplican en el caso de los centros avanzados y que marcan la diferencia de ambas categorías.

De acuerdo a esas variables, el Hospital Padre Hurtado es un Centro Esencial, y el Hospital Sótero del Río, Avanzado. Con ambos hospitales certificados en sus categorías específicas, la red que integran en el Servicio de Salud Metropolitano Sur Oriente se fortalece al tiempo que garantiza a los vecinos de las comunas de La Pintana, San Ramón, La Granja, Puente Alto, Pirque, San José de Maipo y La Florida, una atención de calidad, acreditada en caso de enfrentar un Accidente Cerebrovascular, lo que acorta las brechas existentes con la salud privada, al ofrecer condiciones similares a pacientes de comunas vulnerables.

El resultado de este proceso de más de 15 años supuso el desarrollo de infraestructura, la creación y consolidación de un equipo integral, alcanzando estándares de la mejor evidencia clínica mediante protocolos, además de ciertos requisitos obligatorios de infraestructura de la Unidad de Urgencia, de servicios básicos, diagnóstico y rehabilitación. Contar con acceso de atención aguda, acceso a servicios de ambulancia; equipos de enfermería y TENS con entrenamiento en ACV; acceso a atención hospitalizada en UTACs (unidades especializadas en el tratamiento de ACV agudo), y un sistema organizado que permite integrarse con la red de hospitalización domiciliaria y atención ambulatoria.

Por otro lado, el Dr. Andrés Silva, jefe de la Unidad de Accidentes Cerebrovasculares del Hospital Dr. Sótero del Río, detalló: “Este proceso duró casi dos años, en donde cada uno de los estamentos se dedicó a dar lo mejor para lograr el objetivo. Es un gran logro para nosotros, pues es un reflejo de cómo se ha venido trabajando durante muchos años en mejorar la atención de los pacientes con accidentes cerebrovasculares. Asimismo, se demuestra cómo hemos construido un equipo que intenta mejorar día a día y que sentimos que estamos haciendo bien las cosas, para ser un ejemplo a nivel nacional”.

El Dr. Silva destacó el gran orgullo para él y su equipo de lograr dicha distinción y la responsabilidad que tiene el hospital frente al país. En este proceso participaron médicos, enfermos, técnicos de enfermería, tecnólogos médicos, el equipo de rehabilitación; kinesiólogos, terapeutas ocupacionales y fonoaudiólogos.

Por su parte, el Dr. Víctor Hugo Navia, jefe de la Unidad de Neurología del Hospital Padre Hurtado, quien ha sido parte de este proceso desde que se inició en 2005, enfatizó: “Hoy, el hospital cuenta con trombólisis endovenosa y trabaja en red para la derivación de trombectomía mecánica con el Hospital Dr. Sótero del Río. El manejo de ACV en el hospital implica un trabajo coordinado desde el prehospitalario, el servicio de urgencia, de medicina, cuidados de enfermería, nutrición, servicio social y rehabilitación en las distintas etapas del proceso intrahospitalario y ambulatorio”.

“El autodiagnóstico nos permitió identificar fortalezas y ver oportunidades. Trabajar en el Padre Hurtado enseña a considerar la realidad local y valorar esa identidad. Este hospital está inmerso en una realidad vulnerable, donde muchos pacientes tienen problemas en la adherencia a los fármacos. Hay determinantes y condicionantes de la salud que hacen que nuestros pacientes tengan incluso más carga de enfermedad que otras comunas: Hay más hipertensión, más diabetes, altos índices de obesidad y en varios casos, más de una patología asociada (polipatología). Este hecho nos exige estar preparados frente a requerimientos sociales con pacientes que quedan con dependencia de un equipo de apoyo y de salud. El proceso para el paciente no termina en el hospital, más bien se inicia, ya que sigue en su casa y se extiende para toda la vida. El hospital es parte también de ese proceso y no puede desentenderse de aquello”, agregó el Dr. Navia.

Adicionalmente, el Dr. Navia dijo: “En este proceso de certificación, se establecieron alianzas y oportunidades. La Iniciativa Angels ha sido un factor importante en la formación de enfermeras, por ejemplo, que han hecho el diplomado en AHA, Enfermería Práctica Avanzada y varias son expertas en el manejo de ACV. Tienen un rol fundamental para dar continuidad al proceso e ir formando a nuevos profesionales. De hecho, el ejercicio de la docencia en el establecimiento ha sido de gran ayuda para que el equipo se siga consolidando”.

Esta certificación adquiere una relevancia social, más allá de la satisfacción institucional, teniendo en cuenta que en Chile, durante 2021, esta patología fue la segunda causa de muerte después de las enfermedades isquémicas del corazón, sin considerar los decesos provocados por la pandemia del SARS-CoV-2. Se registraron 7.501 defunciones por ACV en ese periodo, lo que equivale a una muerte cada 72 minutos, según cifras del Ministerio de Salud.

Fuente: Hospitales Dr. Sótero del Río y Padre Hurtado